Es la Innovación.
Hace algunos años fue célebre la frase “Es la economía, estúpido”, ideada por los asesores de Bill Clinton como una de las ideas centrales de su programa electoral durante la campaña presidencial de 1992, para señalar la importancia de enfocarse en los aspectos esenciales de un tema. Hoy en día, con múltiples variantes, sigue utilizándose con frecuencia alrededor del mundo.
Hemos logrado durante este periodo una sensible mejoría en la percepción y en los indicadores de PANLAR como organización. El crecimiento obtenido y el proyectado nos permiten ser optimistas en este aspecto. Cuando hablamos con pares de otras regiones del mundo sobre la posibilidad de una reumatología global y perciben este crecimiento, nos impulsan a especializarnos en cosas que puedan resultar novedad desde su punto de vista. Entonces, aportes como un mejor conocimiento de la chikungunya o el chagas son bienvenidos si provienen desde nuestras regiones, como si los avances en la mayoría de enfermedades que vemos los reumatólogos del mundo como artritis reumatoide, lupus, espondiloartritis, por nombrar algunas, estuviese reservado sólo para personas procedentes de esos importantes centros de conocimiento, subestimando de alguna manera los aportes originales que podemos hacer desde nuestra región. Los que han seguido esa recomendación han logrado distinguirse de alguna forma, mas siguen representando un porcentaje mínimo de lo que podemos hacer y producir como región.
Acá es donde volvemos a la frase de Clinton adaptada a esta situación.
Hay que decirlo fuerte: “Es la innovación, estúpido”.
Creemos que únicamente a través de la innovación es posible avanzar y contribuir a una verdadera reumatología global. Estamos ingresando en la cuarta revolución industrial, después de la revolución agrícola, la industrial de empresas, y la tecnólogica, estamos ahora en la época de la convergencia digital, del internet de las cosas e inteligencia artificial. En pocos años muchas de las cosas que hacemos se harán de otra forma o tendremos nuevas herramientas para hacerlas mejor, serán más económicas y estarán disponibles para más personas (ver video de mi presentación El futuro es ahora).
Creo que no tiene sentido alguno solo especializarse en cosas que los otros no hagan. Más allá de intentarlo, podemos hacer lo que todos conocemos pero de forma distinta, mejor y novedosa: no podemos ni debemos perder esta oportunidad.
Desde PANLAR hemos dado pasos concretos que pueden explicar mejor nuestro pensamiento sobre la innovación.
- La hemos incluido como uno de los pilares del Plan de Desarrollo.
- Cada uno de los comités permanentes de PANLAR maneja los asuntos de innovación como eje medular de su plan de acción y en la elaboración de indicadores de seguimiento.
- Lanzamos un Premio de Innovación que busca identificar y asignar recursos para ideas novedosas en todos los campos de la reumatología. En ambas versiones hemos recibido 17 proyectos de todas las regiones geográficas de PANLAR, un número muy por encima de lo que recibimos normalmente para la convocatoria del premio PANLAR , el más prestigioso y antiguo de los que otorgamos.
- Hemos incluido en la arquitectura de los eventos PANLAR espacio para todos los temas de innovación.
El acceso a pensamientos y tecnologías innovadoras no es importante únicamente para el profesional, sino también los pacientes se han apropiado de ello. Muchas de estas tecnologías ya están disponibles y hay innumerables formas de fomentar la innovación. La escasez es la madre de la innovación y de eso sabemos más que nadie los latinoamericanos. Nuestra visión no debe diferir para nada de aquellas de quienes buscan el conocimiento e impactar en su entorno en otros lugares.
Si queremos tener un liderazgo preponderante en la nueva economía y situar a PANLAR como un lìder indiscutible en un entorno de reumatología global, debemos seguir apostando a la innovación como ese factor diferencial.
No hay nada que perder y todo por ganar para los latinoamericanos.